Ahora estamos consumidos por no habernos decidido a bailar en plena batalla
Retazos nocturnos:
Tiembla mi alma.
Ya no soy el que fui.
Nunca seremos los que fuimos.
Caminamos hacia la nada, pisando sobre el alambre.
¡Todo es tan frágil!
Enloquecido ante la Nada.
La Historia (será Kafka) es la de la población abocada a la Tragedia.
Prefiero a las personas de una en una.
La turba cada día me da más Miedo.
Puesto a preferir, me quedo con las afueras, con las estepas perdidas.
No necesito del Ruido.
Habito en el Canto III.
Viaje entre las ruinas de apeaderos
sombras de aquellos hervideros de vida que fueron.
Marchita la piedra, ahora frágil, rota por el óxido del tiempo.
No sé hacia dónde caminan los trenes ahora.
Marchan sin rumbo, guiados por guardagujas que ya no tienen poder alguno.
Son los interventores los que deciden políticamente sin contar con los políticos.
Los interventores son los mercaderes de las grandes Compañías.
Los guardabarreras, los jefes de tren, los sobrestantes, los que aprendieron
el oficio de maquinista respirando denso vapor
los que han sido ninguneados.
Los que manejaban las herramientas políticas ya no las poseen.
Los aduaneros han vuelto a hacerse los dueños del Continente.
El Mundo en manos de los Otros.
Imposible escapar de la impuesta mansedumbre.
Imposible ser burbuja flotante en los limites gravitatorios.
Los rituales, las narraciones, los siglos de pelearse
con la insensatez de no pisar nada seguro.
Las soñadas independencia radical y libertad que nunca están.
Nos movemos entre monstruos y pesadillas.
Entre especulaciones y corrompidos.
Entre brujas, bosques de eucaliptos y almas en pena.
Hacemos equilibrios sobre alambres de hipoteca
contratos de trabajo que son más bien condenas a galeras cuanto menos.
Caemos en la cuenta de todo ello un instante antes de que el alma nos abandone
y expiremos.
Toneladas de ansiedad.
Quintales de ansiolíticos.
Montañas de ibuprofeno.
Retrato al oleo de este siglo XXI.
A la deriva.
Angustia ante la mirada desorientada.
No haber sido antes de ser. El desplome seguido del derrumbe.
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